Lucy The Cat

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Había una vez una gatita llamada Lucy que vivía en una pequeña casa con su dueña, una niña llamada Sofía. Lucy era una gata muy juguetona y curiosa que disfrutaba pasar sus días explorando los rincones de la casa y persiguiendo mariposas en el jardín.

Un día, mientras Sofía estaba en la escuela, Lucy decidió aventurarse más allá de los límites del jardín. Corrió por los callejones y saltó por los techos hasta llegar a un parque donde nunca había estado antes. Allí, encontró a una pandilla de gatos callejeros que se reunían en una esquina del parque.

Lucy, emocionada por la posibilidad de hacer nuevos amigos, se acercó a ellos. Pero la pandilla de gatos no parecía muy amigable. La mayoría de ellos gruñían y bufaban, mientras que otros simplemente ignoraban a Lucy. Desilusionada, Lucy se alejó de ellos y regresó a casa.

Cuando Sofía llegó de la escuela, notó que Lucy estaba un poco triste y decidió hacer algo especial para animarla. Preparó una caja llena de juguetes y golosinas para gatos, y pasó la tarde jugando con Lucy y haciéndola sentir amada y cuidada.

Desde ese día en adelante, Lucy aprendió que no necesitaba salir de casa para ser feliz. Sabía que tenía todo lo que necesitaba allí, junto a su dueña Sofía. Y aunque a veces sentía curiosidad por explorar más allá de los muros de su casa, sabía que siempre tendría un hogar cálido y amoroso que la esperaba.